En septiembre 2019 aparecía la noticia de que la Comunidad de Madrid aplicaba el castigo a la profesora que le ganó en los tribunales cobrar los meses de verano. Su centro la suspendió de empleo y sueldo durante siete días a pesar de que la justicia aun no había resuelto sobre esta sanción.
Se trataba de Mely, una mujer que llevaba treinta años trabajando en la educación pública, los últimos años como profesora de francés en la Escuela Oficial de Idiomas de Tres Cantos. En 2015 Mely llevó a los tribunales a la Comunidad de Madrid para reclamar el cobro de los meses de verano a pesar de estar contratada como interina. Fue la primera sentencia que reconoció ese derecho a una profesora con este tipo de contrato y posteriormente fueron más tribunales y docentes los que se sumaron a esta reivindicación histórica del profesorado.
Sin embargo, el conflicto que le ha llevado a ser sancionada ocurrió un año después de aquella victoria judicial. Mely tuvo un encontronazo con la dirección de esta escuela de idiomas que es el que le ha llevado ahora a estar suspendida de empleo y sueldo durante siete días. Ese curso, esta docente tenía contrato hasta el 30 de junio y se negó, debido a la fecha de vencimiento de su relación laboral con la escuela de idiomas, a dejar preparados los exámenes de recuperación de septiembre. Según esta profesora, esa misma orden ya la había recibido anteriormente en otras dos escuelas de idiomas que sí aceptaron que no era su cometido dado que el contrato no abarcaba los meses de verano. Por este motivo, Mely presentó un recurso contra la orden que había recibido y que nunca acató. Ahí comenzó su periplo administrativo y judicial. En sus sucesivos recursos contra esta orden, la justicia nunca le dió la razón. Tanto en la vía administrativa como en la vía judicial, Mely no consiguió que se reconociera que era una orden contraria a derecho.
Sin embargo, su sorpresa llegó cuando año y medio después de oponerse a cumplir aquel dictado de la dirección de su centro, se le comunicó la apertura de un expediente sancionador. Según Mely fue a finales de 2017. Ese expediente proponía la sanción que se le ha aplicado ahora, siete días de suspensión de empleo y sueldo. Mely también la recurrió y ha llegado hasta la vía contencioso-administrativa que es la que está abierta ahora mismo. El próximo mes de febrero tiene cita en los juzgados para la vista oral de esta demanda. Mientras tanto, la consejería de Educación no ha esperado a lo que dictaminen los jueces para aplicar el castigo.
La consejería de educación asegura que legalmente puede aplicar la sanción porque esta docente no pidió que fuera suspendida de manera cautelar en su demanda contra ellos. Mely asegura que no lo incluyó por recomendación de su abogado y lamenta el momento elegido por su escuela de idiomas, justo a comienzos de curso y a unos meses de la celebración del juicio.
Fuente: https://cadenaser.com/emisora/2019/09/16/radio_madrid/1568614471_919018.html